María Corina Machado: de la clandestinidad al Premio Nobel de la Paz
- fussionvipmagazine
- 10 oct
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La líder opositora venezolana María Corina Machado ha sido galardonada con el Premio Nobel de la Paz 2025 por su firme defensa de la democracia, su rechazo a la militarización del poder y su lucha pacífica por una transición política en Venezuela. Desde el exilio, su voz ha logrado movilizar a una nación y captar la atención del mundo
Por Ysabel Parra
En una mañana de otoño cargada de emoción en Oslo, el mundo despertó con una noticia que estremeció corazones y renovó esperanzas: el Premio Nobel de la Paz 2025 fue otorgado a la líder opositora venezolana María Corina Machado, por su incansable lucha en defensa de los derechos democráticos del pueblo de Venezuela.

En palabras del Comité Noruego del Nobel, Machado ha logrado “mantener encendida la llama de la democracia frente a una oscuridad creciente”. Una frase que no solo describe su papel político, sino que recoge el espíritu de una mujer que ha sabido resistir, inspirar y unir.
El presidente del Comité Noruego, Jørgen Watne Frydnes, fue enfático al explicar los motivos del galardón:
"Ha conseguido aglutinar a las fuerzas opositoras de su país. Se ha mantenido firme frente al avance de la militarización en la sociedad venezolana. Y ha sostenido con convicción su compromiso con una transición pacífica hacia la democracia.
María Corina Machado se convierte así en la primera venezolana en recibir el Nobel de la Paz. Lo hace no desde el poder, sino desde la lucha. Desde las calles, desde la palabra y desde la convicción de que la democracia no es un privilegio, sino un derecho.
El testamento de Alfred Nobel establece que este premio debe ir a quienes promuevan la fraternidad entre los pueblos, reduzcan los ejércitos permanentes y fomenten congresos de paz. Para el Comité, María Corina ha encarnado esos valores con claridad.
Una vida al servicio de la libertad
María Corina Machado ha sido, durante más de dos décadas, una de las voces más visibles, y valientes, en la defensa de la democracia venezolana. Perseguida, inhabilitada, despojada de sus derechos políticos, ha enfrentado amenazas, campañas de difamación y todo tipo de obstáculos. Pero nunca ha cedido.
Desde los días fundacionales de Súmate, cuando luchaba por la transparencia electoral, hasta su más reciente papel como candidata unitaria de la oposición, su causa ha sido una sola: rescatar la dignidad de un pueblo.
¿Podrá estar en Oslo?
Aún no se sabe si podrá asistir a la ceremonia en diciembre. Las restricciones impuestas por el régimen venezolano siguen vigentes. Pero su mensaje ya ha llegado al mundo.
En las calles de Caracas, en barrios populares y urbanizaciones, en ciudades que llevan años apagadas por la crisis, muchos hoy sienten una chispa de luz. En las redes sociales, miles de venezolanos expresan su emoción, su orgullo y su gratitud.
El Premio Nobel de la Paz 2025 no es solo un reconocimiento a una figura política. Es un homenaje a la resistencia civil, al poder de la palabra y a la fuerza de una causa justa. Es también una advertencia: el mundo está mirando. Y la lucha por la libertad en Venezuela no ha sido en vano.
Hoy, María Corina Machado no solo representa a los venezolanos. Representa a todas las mujeres que se han enfrentado al autoritarismo con dignidad. A todos los pueblos que luchan por ser escuchados. A todos los que creen que, incluso en los tiempos más oscuros, es posible defender la verdad sin empuñar un arma.
Como dijo el Comité Nobel: “En un mundo que parece desmoronarse entre conflictos y dictaduras, hay quienes eligen el camino más difícil: el de la paz con justicia. María Corina Machado ha sido una de ellas”.



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